Según una encuesta de Demoscopia, tras más de un mes del Movimiento 15M, el 75% de los españoles sigue apoyando de forma mayorittaria las medidas y reformas que rehivindican. Cuatro de ellas son apoyadas por más del 90%:
1. Que no prescriban los delitos de corrupción.
2. Que las empresas con beneficios no puedan hacer despidos masivos.
3. Que todo el dinero que se haya dado a Cajas y Bancos para arreglar sus desaguisados sea devuelto.
4. Que la entrega de la vivienda dé por saldada la deuda hipotecaria.
Si más del 90% de la población apoya estas demandas, ¿A qué esperan nuestros políticos para ponerlas en marcha? Si un partído político se siente exultante y triunfador cuando en unas elecciones obtiene el 40%, ¿No deberían tomar este 90% como un mandato inexcusable para moverse?
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